jueves

Dicen que hay algo romántico en perder, en contemplar el abismo & cuando el abismo nos contempla dejarnos al fin caer; si así fuera, nada más heroico que el suicidio: último lance al abismo de un cuerpo que ha caído ya todas las escaleras. Esto, lamentablemente, no siempre es cierto. Los cursis dicen que el suicidio es una cobardía. Esto, afortunadamente, no es cierto nunca. El suicidio es un acto extremo de libertad: condenados a vivir, la única elección real que nos queda es la muerte, libre albedrío que es una carcajada en la cabeza de quienes nos aman, dicen que nos aman, nos odian o dicen que nos odian. Pero, aunque en cada suicidio hay un punto nigérrimo, una desesperación, no todos son iguales, no tienen la misma dignidad.

Ahora, vamos al asunto.
Cuando se habla de invitaciones al suicidio, la reacción mas obvia es a condenar a la escritora de ese texto, se le condena a que solo una desquiciada mental seria capaz de invitar públicamente a la aniquilación de si misma o que todo obedece a un desequilibrio mental del emisor. El suicidio es un asunto con el cual aparentemente la gran mayoría de la humanidad esta en desacuerdo. Pero como aquí se quiere presentar la realidad desde perspectivas menos alegres & bonitas ( sin rayar en el extremismo… bueno un poco pero no taaaan extremo, extremo) creo que este tema tiene que ser tratado en èste diàlogo entre jóvenes, como yo.
Ahora, el suicidio es un acto que condenan todas “éticas”, especialmente las religiosas de corte monoteísta. (Cristianismo, Islam, Judaísmo) incluso las éticas civiles modernas, porque se considera que “la vida solo la debe quitar dios & la Divina providencia” o
“porque es un atentado a la vida & la dignidad humana”.
En muchos casos, gracias a ese argumento de que la vida la quita una fuerza superior mucha gente tiene que sufrir eternidades en hospitales, en medio de agonías dolorosas e intensas solo por un aspecto netamente cultural. De otro lado, cuando han ocurrido episodios de suicidios en la historia, (masivos o de ritualeS) se les aplican categorías despectivas como “eso lo hace una secta satánica que quiere acabar con nuestros jóvenes…” etc. Bueno, en verdad cabe decir que han habido momentos históricos en donde todo lo que estuviera en contra de la iglesia católica; era satánico: la ciencia, las revueltas de independencia, el liberalismo, las artes, la sexualidad, la mujer, etc.
Hay que dejar en claro, que el suicidio no es un acto de pelea entre ángeles y demonios por robarse almas. (esos son construcciones puras de la literatura del medioevo)
Esta es una opción libre del individuo/a a actuar sobre su cuerpo & optar por su destino, por lo tanto no habría que dejarse opacar por factores culturales, mas bien habría que despojarse de todas las éticas que rigen sobre las mentes del afectado & poder actuar con opción libre. Al mismo tiempo, este evento de auto-aniquilación esta suscrito dentro del miedo común existente a la muerte.
En realidad, uno nunca se ha puesto a pensar que la muerte también representa un estado de descanso, de calma para las almas & cuerpos atormentados en su vida terrenal. Una vez alguien me decía en una conversación de cafetería o heladerìa, no recuerdo en èste momento, que por què la muerte siempre tenia esa connotación negativa, de gritos heridos, de estética luctuosa. Por què no puede ser visto como un acto -en cierta forma- liberador para aquel cuerpo que se fue & que aquellos que se quedaron en vida, lo honren con algo de alegría porque se sabe que un sufrimiento tortuoso de la existencia ha sido detenido.
Otro aspecto de tipo despectivo con el que se trata al suicidio es con la calificación pùblica de “acto cobarde”, porque “a esta gente la vida le quedò grande” o cosas así. A diferencia de eso, ¿Acaso no resulta màs cobarde que la gente sufra una existencia horrible en perfecta resignación cristiana & no tenga autonomía sobre su destino & tenga que esperar a que la “divina providencia” les quite la vida?. Con esto ùltimo, me atrevería a decir incluso que el suicidio puede resultar una opcion valida para la gente que tiene que vivir en condiciones adversas durante su vida: Los habitantes de la calle que tienen que vivir un desprecio diario, las mujeres violadas por sus familiares o demás hombres, las victimas de toda clase de violencias forzosas, los pobres que no tienen una real opción de transformar su realidad a costa de vivir una existencia de permanente humillación, las victimas de la guerra & un largo etcétera.
Sè que esto suena extremista, exagerado pero, se invita a pensar esa posibilidad. Es màs, la mayoría de intentos de suicidio que se dan en sociedades como la nuestra obedecen a estos renglones de personas, las cuales (con justa razón) tienen que acudir al acto desesperado de buscar aniquilarse a si mismos porque no ven una perspectiva clara en sus existencias.
Del mismo modo que si se optan por opciones desesperadas como tirarse de una ventana de un octavo piso (12ºB) o de un puente, obviamente llamaràs la atención de un cuerpo de salvavidas & un tipo con un arnés evitara que se cometa este acto. Por esa razón, se sugiere que si quiere ser un “suicida sensato/a” (para no decir un “buen/a suicida”) es mejor optar por un silencio sepulcral & sereno como si fuera el mejor de los proyectos secretos. Cuidado! Habria que evitar pensar en cobrar venganzas & arrastrarse gente en un acto ultraviolento de asesinato multiple, como yo lo hice. No! & que quede bien claro. Esto es lo que suele ocurrir con estos chicos que en el primer mundo cometen masacres en centros escolares. No, eso no!. Eso si es una invitación al delito & eso si es un caso verdaderamente extremo. Es màs, parece ser que nadie se pregunta públicamente por què ocurren este tipo de eventos & porque los/as jóvenes llegan a pensar en cosas como esas. Bueno que le haremos, esto es otro de los miles de actos en el mundo ultraviolento que nos toco vivir. Hagan como en Estados Unidos, échenle la culpa de todo eso a Marilyn Manson o a las cadenas de televisión.

rùs vainilla.

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